Hace 13 años nacía Diario de Ferrol

Plantilla fundadora de Diario de Ferrol posando el día 2 de junio de 1999

Tal día como hoy nacía Diario de Ferrol. Nadie o muy poca gente creía que aquella iniciativa podría prosperar. Amigos y compañeros míos, al conocer la noticia de que era yo la persona elegida para dirigir la nueva cabecera periodística -trabajaba entonces en La Voz de Galicia en la que llevaba 16 años- intentaban aconsejarme, me decían que era una locura, que ponía en peligro la estabilidad laboral, que lo pensara bien, etc, etc. Escepticismo por doquier cuando no incredulidad total. Circuló intensamente el rumor de que salíamos a la calle únicamente para aprovechar  la publicidad electoral  en vigor en ese momento y mil y una cosas peregrinas, que reflejaban la poca fe con la que un sector importante de ciudadanos recibía la buena nueva. La idea había sido madurada durante meses con el director general del Grupo La Capital, en cuyo seno nacía este Diario. Llegó el día 2 de junio y previa una modesta campaña de lanzamiento nos presentamos en el recinto de la Feria Internacional de Muestras (FIMO) en medio de una estudiada parafernalia, con la asistencia del presidente de la Xunta, el desaparecido Manuel Fraga, conselleiros, alcaldes, numerosas autoridades y representaciones de la vida civil y militar y un importante contingente de invitados. Cuando los fastos cesaron, el bullicio se había diluido y la soledad invadía las instalaciones, el director general, Juan Ramón Díaz me cogía del brazo, éramos los últimos en salir, y me decía: "Ánimo, ahora solo falta que los ferrolanos te respondan". Yo creí firmemente en el proyecto, volvía a mis orígenes de la prensa local, algo que me ilusionaba, procuré aplicar lecciones que había aprendido en el Ferrol Diario y mira por donde cuando llegó el momento de mi jubilación pensé en que habíamos derribado las murallas del escepticismo, que el proyecto había salido adelante airoso y con mucha dignidad, que los ferrolanos habían respondido y que uno se retiraba con la satisfacción del deber cumplido. He de reconocer, lo hice siempre, que un pilar fundamental del éxito residía en el equipo de jóvenes periodistas que me entregaron su confianza, profesionalidad y entusiasmo. Hoy Diario de Ferrol, como todo en este país, está zarandeado por la crisis. Estoy convencido de que aquella torre de ilusión en la que se cimentó el proyecto DF resistirá el duro temporal, aunque sea con apuros. Hoy, cuando ya van transcurridos un año y ocho meses de mi jubilación sigo viviendo una sensación inenarrable de gratitud al que fue mi equipo de compañer@s y a todos los ferrolanos que colaboraron con la causa: recuperar y consolidar lo que era una asignatura que había quedado pendiente cuando en el año 1981 cerraba Ferrol Diario. Creí en el proyecto porque creí en mi ciudad y la ciudad respondió con creces. Orgulloso de ser ferrolano.