domingo, 30 de junio de 2013

Un ligero alivio en la destrucción de empleo


Menos mal que el polígono de O Boial, con el Parque Ferrol, emerge como una tabla de salvación, aunque solo sea para decir que no todo es destrucción de empleo en la comarca ferrolana. Recientemente, abría la firma Brico Depot, con cerca de 60 empleos, próximamente lo hará Media Markt, con cincuenta puestos de trabajo y detrás vendrá Carrefour...En fin, que siga la racha, que no se detenga. El problema será quién va a comprar en tanto centro comercial, si el poder adquisitivo salarial merma a pasos agigantados, si el consumismo muere a los pies del "austericidio", reformas, recortes, hachazos a la economía que nos están dejando, como un ciego recientemente lo expresaba de manera muy gráfica en una asamblea de accionistas de Bankia, en cueros. No obstante, no agüemos la fiesta, porque cabe suponer que las grandes multinacionales habrán hecho el debido estudio de mercado en esta zona para fijarse en ella y "plantar" aquí sus tiendas especializadas. Y decía al inicio menos mal porque estamos viendo que el sector naval, histórico motor de la producción en Ferrolterra, se desangra. Ayer leía en Diario de Ferrol que desde que se anunció el encargo del flotel para PEMEX, pedido fantasma -no será que no estemos curtiditos en Ferrol en la venta de humo- va cerca de un año, se destruyeron más de 1.200 empleos, cifra que hay que sumar a otros mil perdidos con anterioridad. Por si esto fuera poco, como han venido propagando los medios de comunicación, la potente empresa siderúrgica Megasa está en peligro debido a una norma gubernamental sobre la tarifa eléctrica, que ahoga a esta tradicional industria, nacida de la mano de emprendedores de la zona. Añadamos los ajustes de plantillas, ERES, despidos y nos da una tasa de paro, la más alta de Galicia. De acuerdo con las últimas informaciones estaríamos en el 32% de desempleo. Realmente una tragedia humana en forma de depresión económica. Pero vuelvo al principio para acabar con un rayito de optimismo. Todas las miradas de jóvenes en paro están puestas en estos momentos en O Boial. Algunos encontrarán trabajo.

viernes, 28 de junio de 2013

Concepción Arenal, en el curso Gurméndez


Contra viento y marea, que podía ser la metáfora de la gravísima crisis que padecemos, el curso de pensamiento Carlos Gurméndez alcanza su decimosexta edición. Hasta el presente, es el curso de verano que más éxito ha obtenido por el número de asistentes, lo que está en consonancia con el perfil relevante y pestigioso de los ponentes así como del interés de los temas hasta ahora tratados. Se desarrollará del 10 al 12 de julio, ambos inclusive, en el salón del vicerrectorado del campus universitario ferrolano. Este año lleva el título "Concepción Arenal, paixón pola liberdade e a Xustiza" y cuenta con la colaboración del Colegio de Abogados, además de la Universidade da Coruña, que ha ido en todo este tiempo de la mano del Club de Prensa de Ferrol, impulsor del mismo. Es una pena que la actividad haya tenido que "emigrar" del Ayuntamiento de Pontedeume. La política, es decir, el juego de intereses de las distintas formaciones ha provocado que las dos últimas ediciones hayan tenido que celebrarse en Ferrol. El curso nació en la distinguida villa marinera porque fue allí en donde el filósofo y periodista pasaba largas estancias veraniegas, en donde se inspiró buena parte de su obra, en donde, a su muerte, se le homenajeó y nombró hijo adoptivo. Además, la belleza natural de este pequeño enclave turístico, con sus monumentos emblemáticos cargados de historia, marca de los Andrade, que combina la refrescante estampa marinera con la sugestiva paz y bucolismo del río, que establece la ruta de las Fragas do Eume, se había convertido en el marco ideal para recibir y alojar a los participantes y eminentes personalidades que dan contenido a la actividad académica. Pero, en fin, dejando a un lado esta incidencia, que no deja de ser un sentido lamento, el curso Gurméndez sigue vivo, acusando, eso sí, algunas estrecheces por razón del momento que vivimos. En esta ocasión la iniciativa lleva el sello local al abordar la figura y obra de la penalista ferrolana Concepción Arenal. Todo preparado, pues. Los datos y pormenores pueden consultarse en la página web del Club de Prensa de Ferrol.

miércoles, 26 de junio de 2013

Historias para recordar: el transporte de agua dulce a Canarias


La crisis agudiza la imaginación. Ferrolterra llegó a "acariciar" mil y un proyectos a lo largo de las últimas décadas, pero nunca cuajó iniciativa de envergadura alguna. He recordado en estas "Acotaciones de un ferrolés" que una de las industrias que llegaron a generar mayor ilusión, incluso se habían desplazado a Italia grupos de trabajadores para ponerse al día de la dinámica y producción de la empresa, fue la SIV (Sociedad Italiana del Vidrio). Llegó a lucir en terrenos de Astano un gran cartel que anunciaba el maná prometido. Nada de nada. Hace ahora 35 años se habló de otro proyecto que daría trabajo a los astilleros de la ría. Era obra de un ingeniero ferrolano, Primitivo González, que abanderó el traslado de agua potable a las islas Canarias a través de buques aljibes. En la ilustración puede verse como el desaparecido Ferrol Diario trataba el asunto en su portada. Inicialmente se cifraba el supuesto pedido en ocho buques "serían baratos y tendrían un coste de explotación muy bajo por la simplicidad de sus equipos" subrayaba el rotativo local. La carga del agua podía realizarse en varias de las rías gallegas dadas las magníficas condiciones de calado que reunían "quizás únicas en el mundo", pudiendo aprovechar así el abundante caudal de nuestros numerosos ríos, que se pierde en el mar, tras producir energía en los embalses hidroeléctricos. El destino podría ser cualquiera de las islas, pero principalmente Fuerteventura, isla en la que falta de agua es acuciante y extremadamente cara su potabilización a partir de agua de mar. Se decía entonces que los buques podrían estar preparados para transportar contenedores en su viaje de retorno "y así Galicia sería centro de distribución de productos agrícolas obtenidos en las islas, hacia el continente, con lo que el coste del traslado de estas mercancías se abarataría considerablemente". Pues estabas muy bien pensado esto, pero la idea de Primitivo González se quedó en aguas, pero de borrajas. Los amigos canarios, lo que se han perdido y no digo los ferrolanos que tenían la cartera de pedidos de los astilleros bajo cero y además se beneficiarían de los productos agrícolas cultivados en aquellas bellas y extraordinarias islas. Historias para recordar.

lunes, 24 de junio de 2013

Los ritos del agua y el fuego en la noche de San Juan


Hay mil y una historias y leyendas alrededor de la noche de San Juan en la que el agua, fuente de vida, y el fuego purificador tienen una particular presencia. Cuando yo era joven, proliferaban las luminarias, como hoy, y se saltaban al grito de "salta luminaria de San Xoán que non me trabe cadela nin can". Cuando ya el fuego se extinguía nos dirígíamos a la fuente de San Juan que hay en las proximidades de la iglesia de Esmelle en donde bebíamos el líquido elemento y expresábamos nuestros deseos. Andando el tiempo se asoció a esta fiesta lo de las sardinadas, que, por cierto, en estas fechas alcanzan un precio prohibitivo, pero aún así y además de la crisis, la fiesta no decae. Pero ¿cómo disfrutaban esta tradición nuestros ancestros? Hace 130 años, por ejemplo, se lanzaba una clara de huevo en agua, se dejaba al sereno y al otro día se "nigromanteaba" sobre el resultado. El cronista de El Correo Gallego escribía: "una jovencita veía en las estrías que deja el agua un altar con sus cuatro velas y decía "me caso este año". Otra veía un barco con sus mástiles, sus vergas, en fin, un verdadero "clipper" y decía "me caso este año con un marino" y otra veía una chimenea con su tubo de descarga al lado de un silbato, su chaqueta y decía "me caso este año con un maquinista". También hay que hablar de la leche. Decía el periodista "hay personas que no la prueban en todo el año, pero ¿qué se diría si la mañanita de San Juan no se tomasen cuando menos un par de azumbres? Este par de azumbres por la mañana eran de leche y por la tarde eran de vino.  He leído también que en la ciudad de Ferrol hace un siglo las calles más céntricas estaban jalonadas de hogueras y actuaban las músicas y algunas rondallas. Ayer, en la zona que habito (rural), olía intensamente a humo al anochecer. Inevitablemente, vinieron a mi mente recuerdos, nostalgias, experiencias de una vida que cada vez queda más atrás.

sábado, 22 de junio de 2013

Hallazgos



Reportaje de La Esfera de fecha 21-08-1926 (Hemeroteca digital
de la Biblioteca Nacional de España)
En esta "manía" mía de descubrir el pasado de la ciudad que me vio nacer y que orgullosamente habito siempre existe la posibilidad de hacer algún hallazgo que, cuando menos, documente o ilustre la intrahistoria, concepto que acuñó don Miguel de Unamuno, en cualquiera de sus aspectos, de manera especial el social y costumbrista como es el caso que a continuación expongo. Permitidme una licencia previa. Cuando me sumerjo en la hemeroteca experimento una sensación muy parecida a la del pescador -¡ay la pesca, lo que me relajaba!- que lanza las artes al fondo del mar y aguarda ansioso, nervioso, inquieto, la sacudida, fuerte a poder ser, que rompa la monotonía de la paciente y "profesional" espera. Enlazando el paralelismo he de decir que cobré una hermosa pieza, que viene a complementar los capítulos de "La calle Real de los años 20" del siglo pasado que recientemente escribí. Curiosamente, el Cronista Oficial de la Ciudad, don Ricardo Nores Castro, que nos había servido de faro y guía en el detalle de los establecimientos públicos que hicieron época, no hacía referencia, sin embargo, a la que parece una de las "joyas de la corona", el llamado "Real Café Bar", que yo encuentro en una publicación madrileña La Esfera y a toda página, con diversas fotos de las estancias y ubicación. A tenor de las imágenes, se trata de un local de sello modernista, precioso en el más estricto sentido de la palabra. Dice el periodista que lo describe -no va firmado- "si en la instalación de todos sus detalles se observa el refinamiento modernista, caprichoso y delicado, no mengua el mérito de su cabeza directiva al haber coordinado un conjunto cuya armonía artística tiene un resplandor alegre y muy en orden con el fin a que es destinado". Del salón del café escribe "si bien este salón es uno de los mejores instalados que he podido observar en las distintas poblaciones que he visitado, son dignos también de encomio los otros departamentos de recreo". El "Real Café Bar" era propiedad de D. Cándido Fraga Silva y había sido inaugurado, según obra en El Correo Gallego, el 2 de mayo de 1926. Del rotativo ferrolano, fecha del 04-05-1926, entresacamos "El Real café Bar representa un gran avance en nuestra vida local, es una nueva modalidad en nuestras costumbres, un establecimiento que viene a llenar un vacío en nuestra sociedad". Hace también referencia a que este espacio había estado ocupado por el antiguo Casino Ferrolano. En la sesión inaugural actuó el "Trío Madrid", con violinista y violoncelo (Pérez Díaz y Francisco Gaseat), miembros de la Orquesta Filarmónica de Madrid y el pianista Juan Bernal que había pertenecido a las mejores agrupaciones españolas y extranjeras.

jueves, 20 de junio de 2013

Antaño, concejales y periodistas ferrolanos resolvían sobre el terreno de juego sus eternas rivalidades en el campo de la crítica política


Esta foto se corresponde con la inauguración oficiosa de
la cancha polideportiva de A Malata. El titular del blog
está detrás de la cámara

Una alineación de periodistas en el viejo Inferniño
Antes, a finales de los años setenta y principios de los ochenta, las primeras corporaciones democráticas se medían con los periodistas destacados en el Ayuntamiento, no solo en el debate y análisis diario de la cosa pública, sino también en un campo de fútbol o en una cancha de un polideportivo. En la memoria tengo dos acontecimientos de este género (porque también competíamos con los periodistas coruñeses): un partido jugado en el campo del Meirás y otro de fútbol sala con el que inaugurábamos oficiosamente las instalaciones polideportivas de A Malata. Se cumplen ahora justo treinta y tres años de la celebración del encuentro en el Misael Prieto de Meirás. Releyendo la crónica que apareció al día siguiente publicada en Ferrol Diario, periódico en el que yo "militaba", reviví un momento muy divertido. Ya el titular lo decía todo "Los periodistas, injustamente derrotados por los concejales (4-1) en el encuentro que disputaron el domingo en Meirás". En un antetítulo "El resultado no refleja en absoluto lo ocurrido sobre el terreno". Frente a la superioridad manifiesta de los ediles, alguno de los cuales, como Arturo, había jugado con el Racing en la Segunda División, a los plumillas no nos cabía otra  alternativa que tratar de desdibujar la goleada con una crónica "ad hoc", plagada de ironías "los munícipes dieron por una vez una lección de consenso y eficacia, sin mociones, debates bizantinos ni lamentaciones de indigencia paralizadora". Analizando el bando de los periodistas, el cronista señalaba "es indiscutible que, diga lo que diga el marcador final, el mejor juego, la estrategia y la táctica posicional y el verdadero fútbol fue protagonizado por los periodistas, quienes, sin embargo, no sabían culminar las jugadas". El narrador del partido incluso se detenía en las individualidades y así decía "el joven Manolo Torrente (hoy hombre de informativos de la TVG) encabezó internadas que pueden ser al fútbol lo que el "salto de la rana" del Cordobés a los toros". De José Manuel Orriols, también destacado reportero de la televisión gallega escribía "Orriols nos recordó a Basora" y de un servidor "Man muy voluntarioso y oportuno, como demuestra el gol del honor a su cargo". Respecto a la preparación física añadía "impecable. Quizás desde el punto de vista estético sobraban algunos centímetros de panza por ambos bandos. Termina la reseña describiendo los goleadores de los concejales: Riobóo (2), Romero y Cabado. Después del partido, que estuviera presidido por el alcalde Jaime Quintanilla y el edil Claudio de Cal, unos y otros conciliaron "rivalidades" alrededor de mesa y mantel.

martes, 18 de junio de 2013

Reflexión agridulce


Las galas anuales de Diario de Ferrol congregaban
a centenares de ferrolanos
El pasado sábado, Diario de Ferrol publicaba unas páginas especiales con motivo de cumplirse el 14 aniversario de su fundación. En aras del rigor es preciso subrayar que fue el 2 de junio de 1999 cuando se presentó en un acto público que tuvo lugar en las instalaciones de la Feria Internacional de Muestras (FIMO). Operó con este "especial" el ánimo voluntarioso de no faltar a la cita, siquiera sea de manera testimonial porque este año es la primera vez que no se celebra la tradicional gala anual, asociada, en su concepción, a la entrega de los Premios Diario de Ferrol. La gala cumplía tres objetivos: festejar el cumpleaños, distinguir a personas y entidades en las cinco áreas de Cultura, Deportes, Economía, Sociedad y Universidad-Educación, sin olvidar al premio institucional a una trayectoria y en tercer lugar o primero, según se mire, se había convertido en una fiesta del lector y suscriptor, de claro contenido social, la más significada y multitudinaria de las que pudieran celebrarse en la ciudad ferrolana. Reunía entre ochocientas y mil personas. En el transcurso de este gran acontecimiento se respiraba una especial sintonía o "feeling" entre lectores, seguidores y el equipo de profesionales que se encargaba de confeccionar la obra periodística y renovarla diariamente. En consecuencia, suponía una motivación para todos cuantos interveníamos en la producción. Era una jornada en la que cargábamos pilas. Esta crisis, este desastre que estamos viviendo también afecta, como no podía ser de otra manera, a la prensa y medios de comunicación, en general. La demostración la tenemos en el cierre de empresas, pérdida de empleo, devaluación salarial, deterioro de la calidad y contenidos y para qué seguir. Qué más voy a contar que mis lectores amigos no sepan. Quede, pues, este lamento personal por la ausencia de la gala anual de Diario de Ferrol que no hay que achacar, insisto, a posibles veleidades de empresa, sino a las duras y difíciles adversidades por las que atraviesa este país, en particular, y Europa en general. Aunque a fuer de ser sincero he de matizar que no hubiera estado mal mantener los Premios Diario de Ferrol que podían enmarcarse en un acto sobrio, no necesariamente "suntuoso", sin apenas gastos. Podía quedar como cordón umbilical con los seguidores del rotativo ferrolano y como elemento incentivador de valores de una sociedad en la que desgraciadamente cunde el desencanto por todo lo que está ocurriendo. He sido el director fundacional de Diario de Ferrol y he sido el inspirador e iniciador de estos encuentros anuales. Entiéndase mi quejido que alcanza en forma solidaria a todos los trabajadores, periodistas y no periodistas, que han sido y son capaces de resistir contra viendo y marea los envites de la gran crisis y de mantener con mucha dignidad la bandera de una información honesta y veraz, en definitiva, de un periódico que representa y defiende los intereses de todos los ferrolterranos.

sábado, 15 de junio de 2013

Hildegart, niña prodigio (y II)


Quién era Hildegart? Aurora Rodríguez Carballeira, una vez probado el embarazo, se fue a Madrid parar alumbrar allí a su hija. Cuenta Rosa Cal que la madre fue la única maestra en los primeros años de la infancia. Además de los tres grandes bloques: música, mecanografía e idiomas, la inició en Historia Natural y conocimientos sexuales, "ya que había que educarla en esta faceta para evitar problemas pues la mujer se pierde por el sexo", había manifestado la madre. Luego la llevó a un colegio de monjas en donde se preparó para el ingreso en el instituto Cardenal Cisneros. La fama de niña prodigio se extendió pronto. La reina Victoria la llamó a palacio para que jugase con las infantas, puesto que hablaba inglés perfectamente. Terminó el bachillerato universitario en la sección de Letras. Dominaba francés, inglés, latín y además traducía alemán, portugués e italiano. Antes de cumplir 14 años abandona el instituto para matricularse en la Universidad. "Comienza la época de vigilancia extrema de doña Aurora, que llegará incluso a acompañarla a las aulas universitarias", narra la autora de "A mi no me doblega nadie". Sin llegar a cumplir los 18 años había terminado la carrera de leyes. Fue una de las abogados más jóvenes de España. "Aunque la ley no le permitía ejercer su oficio hasta cumplidos los 21 años, ella abrió su despacho y distribuyó tarjetas ofreciendo sus servicios". A todo esto, la madre, que había programado que una vez cumplidos los 14 años debía comenzar su actividad entre las gentes para "redimir a la mujer", la inscribió en las filas de las juventudes socialistas. Las primeras campañas las dedicó a difundir conceptos de la eugenesia y las segundas, de carácter político. La actuación pública en los primeros años se limitó a las campañas de reforma de la moral sexual que dieron lugar a que Hildegart conociese a los principales sexólogos del mundo. A los 15 años comenzó a publicar y pronto sería premiada por el trabajo "estudio literario comparativo de los amores de Romeo y Julieta, Abelardo y Eloisa y los Amantes de Teruel", primer premio en los juegos florales de la Corona de Aragón. Prolífica columnista, así se desarrollarían los años de la primera juventud de Hildegart. Con abundante obra escrita, dejando constancia de que se trataba de una joven adelantada a su tiempo, participa en mitines y conferencias y a medida que pasaban los años se recrudecían las disensiones entre madre e hija hasta llegar al fatal desenlace ya conocido. Rosa Cal descubre como probable padre de Hildegart a un cura castrense que estaba destinado en Ferrol y que la madre eligió para procrear, desentendiéndose luego de él. Aurora Rodriguez Carballeira fue condenada a veintiseís años de cárcel y falleció (paranoica y esquizofrénica, aquejada de un posible cáncer gástrico) en el año 1955. En el documento que se inserta pueden leerse los méritos que llegó a tener y premios que logró alcanzar Hildegart en tan corta vida, sacado del libro "A mi no me doblega nadie", de Rosa Cal. Gregorio Marañón llegó a compararla con el perfil de Concepción Arenal.


viernes, 14 de junio de 2013

Se cumplen 80 años de la muerte de Hildegart Rodríguez a manos de su madre que le disparó cuatro tiros mientras la joven dormía



Madre e hija en una fotografía de la época
En la mañana del día 9 de junio de 1933, hace ochenta años, Hildegart Rodríguez fue asesinada a tiros por su madre mientras dormía, dramático suceso que ocurrió en la calle Galileo de Madrid en donde ambas vivían. La parricida, la ferrolana Aurora Rodríguez Carballeira, que vivió siempre pegada a Hildegart, a la que quiso educar como la futura abanderada y guía del sexo femenino, presintió que esta quería emanciparse y decidió quitarle la vida. Es una historia novelada, pasada al cine y al teatro. El cadáver de Hildegart fue encontrado por la sirvienta de la casa a la que Aurora había mandado a pasear los perros para de esta manera quedarse sola y poder perpetrar el crimen. Cometido el brutal asesinato,  la parricida bandonó la vivienda con un lote de ropa en la mano y se dirigió a casa del diputado Botella Asensi a quien le contó todo y este decidió acompañarla al juzgado de guardia. Curiosamente, el arma homicida fue hallada en una cama turca que había en la misma habitación en donde dormía Hildegart y, según manifestó posteriormente Aurora, se trataba de un revólver que había comprado con la intención de suicidarse, si bien, finalmente optó por matar a su hija. Una vez hecha la autopsia, el cuerpo sin vida de la joven fue expuesto en la sede del Partido Federal, al que se había pasado Hildegart después de haber sido expulsada por díscola de las filas socialistas. La historia de Aurora Rodríguez Carballeira y su hija Hildegart ha quedado rigurosamente relatada en la obra "A mi no me doblega nadie. Aurora Rodríguez: Su vida y su obra (Hildegart)", Ediciós do Castro de la que es autora la exprofesora de la Universidad Complutense, doctora en Ciencias de la Información y escritora, la ferrolana Rosa Cal. Aurora había vivido los momentos "en los que hervían las ideas de los socialistas utópicos. La militancia liberal de sus padres y abuelos abonó las inquietudes propias". Y así fue como concibió la idea de educar excepcionalmente a una mujer que fuese la bandera y guía del sexo femenino. Su experiencia había tenido un precedente en la educación imprevista de su sobrino al que convirtió en un pianista prodigio con solo tres años, Pepito Arriola que luego describiría una trayectoria brillantísima internacionalmente avalada como concertista. (Continuará)

 


miércoles, 12 de junio de 2013

Calle Real de los años 20: Perfumerías y tertulias (Y III)



Me llama la atención el "paseo" que hace Nores Castro por las sombrererías de la calle Real ferrolana. Claro, hay que situarse en el tiempo. Los sombreros y los tirantes, de uso común. Pues bien, el cronista con el que hemos ido de la mano en estos tres capítulos, nos relata establecimientos con nombres y apellidos. "La sombrerería de Moisés Álvarez con su gran chistera por muestra, metálica y pintada de negro brillante que un día apareció, fruto de una gamberrada de la época, sobre la cabeza del marqués de Amboage". Simpática anécdota. Cita también a la sombrerería militar de Castillo "en la que se confeccionó la primera gorra de marino para el rey Alfonso XIII, siendo a la sazón guardiamarina y que cobró por ella en aquellos tiempos la cantidad de ¡ciento cincuenta pesetas! Se detiene también nuestro "guía" en una perfumería, la de Angueira "con su peña de amigos ocupando el exterior del escaparate como punto de tertulia, en leal y amistosa competencia con la peña de rebotica de la farmacia de Barreiro que en verano se concentraba bajo toldo blanco en la calle, presidida por una gran águila dorada, tallada en madera, que lucía la fachada de la antigua botica". No se podrá decir que Ricardo Nores haya marginado la crónica costumbrista. Destaca, asimismo, la presencia de una casa de cambio, de Juan Llopiz, que ofrecía la suerte de la lotería a sus convecinos y un día 22 de diciembre de 1915 dio íntegro el premio gordo a la dotación del buque Alfonso XIII, en el número 48.685, con seis millones de pesetas. Para finalizar, Nores pasa de puntillas por las sedes de los periódicos El Correo Gallego y el faro de Ferrol, diario este último que no tuvo larga vida "pero que salía a la luz cuando la ciudad contaba con tres periódicos. Menciona la casa natal de Canalejas y no deja en el olvido al "fotógrafo de moda" Pascual Rey, que hacía foto social y artística, pero también foto de prensa. Precisamente, el documentalista ferrolano Guillermo Escrigas tiene la pretensión de lucir en Ferrol una exposición de fotos de Pascual Rey. Para ello me comentó que disponía de unas doscientas instantáneas. Aprovecho la oportunidad para añadir que recientemente se puso en contacto conmigo un nieto de Pascual Rey, que vive por Alicante y que anda en busca de la obra de su abuelo. No se descarta que el Club de Prensa, del que orgulloso soy su presidente fundador y de honra, tome cartas en esa posible exposición y quien sabe si alguna iniciativa más, en el empeño de rescatar del olvido a este gran fotógrafo, que había tenido su estudio en donde hoy está el del que también fuera fotógrafo, Bernardino González.


martes, 11 de junio de 2013

La calle Real de los años 20: los cafés-cantantes (II)


Orquestas en los cafés-cantantes
(Libro "Mestre de Mestres.
Juan Malde na lembranza" de la
autoría de Mª Carme Malde)
Dejando a un lado, por ya tratado, el asunto de los paseos de la calle Real de los años 20, a los que, según escribe Ricardo Nores, se acudía a "coquetear y buscar noviazgo", abordo hoy el papel de los cafés-cantantes, que así se les llamaba popularmente. Marcó época el Café Español, "amplio local circundado de largos divanes de terciopelo rojo y sobre una elevada tarima desfilaban las mejores y renombradas orquestas". El cronista refiere que alternando con selectos conjuntos se fue dando entrada "al género frívolo del cuplé", que, una vez desaparecido el Español "pasó a mostrar su destape en el Royalti, local colindante con el anterior". También merece atención para el observador el Café del Siglo que era escenario permanente de la vida bohemia de aquellos tiempos. Allí tenía su tertulia Andrés Avelino Comerma, general de ingenieros navales "en democrática convivencia" con el popular hombre del humor Francisco Martínez, constructor de obras, el médico Barrós, el peluquero Berrojo, el periodista Manolo Barbeito Herrera y cuantos y cuantos más que han sido novelados por Wenceslao Fernández Flórez en su larga carrera literaria. El Café del Siglo no tenía puertas por estar de servicio permanente. Encuadrado en este tipo de establecimientos hay que hacer constar el café Comercio, aunque este se situaba en la calle Magdalena. En los cafés-cantantes empezó a trabajar como pianista el popular maestro Juan Malde, ya fallecido, según recoge en el libro "Mestre de mestres. Juan Malde na lembranza" del que es autora una hija del pianista, Mª Carme Malde. Esta dice que actuaban día a día en tres sesiones, la del mediodía, la de la media tarde y la de la noche. Para el tercer y último capítulo dejo otro género de locales: sombrererías, perfumerías y sus tertulias y, cómo no, también radicaban en la calle Real las sedes de algunos periódicos de la época.

domingo, 9 de junio de 2013

La calle Real de los años 20


Un aspecto de la calle Real de los años 20
(De la colección de fotos antiguas del archivo
de Ricardo Nores, cedidas por su hijo al autor
del blog)
El otro día llegó a mis manos una especie de crónica que escribió en su día, años setenta en el Ferrol Diario, el que fuera Cronista Oficial de la Ciudad, Ricardo Nores Castro. Él lo titulaba "Los años 20 de la calle Real" y a fe que me resultó muy ameno y divertido. Además, algunas experiencias que él relataba aún se mantenían en mis años jóvenes, década de los sesenta del siglo pasado. Es el caso de los paseos arriba y abajo durante horas en busca de la mirada cómplice, de la sonrisa insinuante, o simplemente por ver el discurrir de la muchachada, especialmente pletórico en fechas muy señaladas, fines de semana, noches del estío, etc. Nores habla de "los paseos matinales y nocturnos que los domingos alcanzaban extraordinaria concurrencia". Agrega que estos paseos se trasladaban al comenzar la primavera "a los cantones de Molins y alameda de Suanzes en absurda discriminación de clases, pues había paseo de arriba o central, con sillería metálica, de pago, y paseo de abajo sin apenas banquillos de madera". Otro de los aspectos que señalaba en el repaso que hacía el Cronista Oficial de la Ciudad de comercios y costumbres de la calle Real era la cantidad de confiterías y al respecto matizaba "los ferrolanos eran y son muy "larpeiros" (que le gustan los dulces). En la calle Real había a pleno rendimiento cinco confiterías que aumentaban en número al llegar el invierno, cuando llegaba Vicente Arqués, "el turronero del año anterior" con sus sabrosos turrones de Jijona. Aquellas antiguas confiterías contaban todas, enftiza el articulista, con su recoleto saloncito de te". Cuenta también que en dicha calle Real existía el comercio "La Variedad", que resultó destruido por un pavoroso incendio allá por el año 1919, "tragedia que inspiró a los copleros del Carnaval:

                                    En el gran incendio
                                    de La "Variedad"
                                    lucieron las bombas
                                    de esta gran ciudad.
                                   

Otros componían en el idioma propio

                                    ¡¡Tendan as mangueiras!

                                    e aquilo vertía

                                    como unha gran peneira.

Continuaré en un próximo "capítulo" con algunos pasajes más de esta crónica en la que Nores Castro traía a la memoria colectiva en aquel entrañable rotativo ferrolano, además de lo expuesto, los cafés cantantes, alguna anécdota curiosa, comercios típicos...

viernes, 7 de junio de 2013

El eterno lamento


Aspecto parcial de la portada de Ferrol Diario
correspondiente al 07-06-1978
Leía ayer en mi querido Diario de Ferrol que el PP había tumbado en la Xunta una moción en la que se instaba al cumplimiento de promesas pendientes como son la habilitación de un gran centro de reparaciones, dique flotante, los floteles, etc. Es frecuente que estas mociones tengan una gran carga política, planteadas en el marco de la dialéctica gobierno-oposición, más que efectividad o capacidad de ejecución. No es la primera vez que se toman  acuerdos en la Xunta que, luego, se quedan en aguas de borraja. Hasta recuerdo a Zapatero, siendo jefe del Ejecutivo, que se comprometió a llevar personalmente a Bruselas lo del veto a la antigua Astano y nada consiguió. Si el mismísimo Presidente tuvo que envainarla, ¿qué podemos esperar de acuerdos que se quedan perdidos en los papeles oficiales de instituciones inferiores y se diluyen antes de convertirse en algo tangible? No estoy negando la acción parlamentaria, tampoco justificando al Partido Popular, no reniego de la acción fiscalizadora de la oposición, que es su deber, simplemente trato de manifestar mi escepticismo o falta de credibilidad. Es que, además, soy ya bastante mayor, escribí la crónica de la crisis de la construcción naval de los ochenta y ante mi desfilaron todo tipo de proyectos fantasmas que se canalizaban a través de aquellos entes (ZUR, ZID, etc) que se diseñaban más que para atraer iniciativas creíbles y para construir ilusiones y esperanzas, para desmovilizar porque era mucha la presión social que lógicamente sobrevino ante el desmantelamiento industrial con pérdida de miles de puestos de trabajo. Hace justo 35 años por estas fechas se ponían de acuerdo en un manifiesto conjunto para "salvar la comarca" las siglas de AP, UCD, PSOE y PC. Incluso hubo manifestaciones unitarias, muy pocas, eso sí, y Ferrolterra siguió y sigue como referente de un erial industrial que tiene que levantarse y andar por sus propios medios, pero esto no es incompatible (antes bien, todo lo contrario, se complementa con el movimiento endógeno) con la ayuda gubermanental como elemento incentivador. Hay ciudadanos que dicen que ya están hartos del lamento, opinión respetable, pero en esas andamos todavía como lo prueba esa convocatoria de huelga general comarcal del día 12, impulsada por todas las organizaciones sindicales. La lucha continúa.

miércoles, 5 de junio de 2013

Manuel Comellas, paladín de las causas justas ferrolanas


El pasado día 3 se cumplían 88 años de la muerte de Manuel Comellas Coimbra y en el pasado mes de abril el 160 aniversario de su nacimiento. Era "un entusiasta paladín de las causas justas ferrolanas" como recordaba hace cien años El Correo Gallego, del que fue su director. "La pérdida que para Ferrol representa la muerte del gran maestro raya en los límites de lo transcendental, acaso por ello pocas veces se exteriorizó el dolor tan espontáneo, tan cordialmente, hasta el punto de que puede decirse, sin incurrir en hipérbole, que desde el momento en que se supo su muerte no hubo más que ojos para llorarle y labios para alabar la gran obra de sus amores: el engrandecimiento de Ferrol", rezaba uno de los fragmentos de la extensa e intensa nota necrológica. No se regateaban adjetivos "su autoridad y prestigio se aunaban con su bondad extrema". Manuel Comellas Coimbra se dedicó a la enseñanza desde muy joven. Por su colegio desfilaron numerosas generaciones "su labor de enseñanza ha sido labor de apostolado". Entre sus alumnos tuvo a Francisco Franco y a Ricardo Carvalho Calero.  Fue director, como decimos más arriba, de El Correo Gallego "que conserva en sus columnas cientos de trabajos valiosísimos". Fue también presidente de la Liga Popular y de la Cámara de Comercio así como "alma mater" del proyecto de ferrocarril de la costa (FEVE). El ilustre ferrolano vivía en una casa de campo en la parroquia de Mandiá. Cuando se murió, al llegar el cortejo fúnebre a Canido, en donde entonces estaba el cementerio, el féretro fue portado a hombros de conocidos ferrolanos, entre ellos el que fue Cronista Oficial de la Ciudad (y concejal animador del hermanamiento con la población lusa de Vila do Conde, que precisamente estos días se conmemoraba en el Ayuntamiento) Ricardo Nores Castro. El historiador Guillermo Llorca dice en su obra "Ferroláns" que como pedagogo defendió ideas renovadoras de apertura de la escuela a la sociedad y el progreso. Fue autor polifacético, literario y periodístico, y escritor dramático de cuya autoría es Pilariña ou Grandeza dos humildes, dirigida por Xaime Quintanilla Martínez, que fue alcalde de Ferrol, fusilado en 1936. Por su labor poética, Comellas recibió numerosos premios.

martes, 4 de junio de 2013

Un músico veterano


Ramiro Rodríguez es el segundo por la izquierda (clarinete) en la fila de atrás
Ramiro Rodríguez en su juventud
Ayer fue enterrado un músico muy veterano. Falleció con 92 años. Se trata del saxofonista Ramiro Rodríguez Rivera, nada menos que cuarenta años director de una de las grandes orquestas ferrolanas de baile, la Bellas Farto. Ramiro fue uno de los tres músicos que entrevisté para el libro "Ferrolterra e as orquestras de baile (1930-2010)" del que soy coautor con el exvocalista Juan Díaz Fraguela. Una de las anécdotas que me contó es muy curiosa. La orquesta tomaba los apellidos de dos de sus músicos fundadores, Bellas y Mauricio Farto. El primero se separó de la banda para fundar las Bellas López, y el segundo tuvo que dejar la actividad por obligaciones laborales, pero quería seguir cobrando porque daba su apellido y la orquesta había ganado mucho prestigio. Ramiro, el ahora fallecido, se hizo con el mando del grupo musical y para no perder la marca Bellas Farto y evitar el "peaje" que le imponía Mauricio, logró que le prestaran sus apellidos un tal Bellas, del barrio ferrolano de Canido y un tal Farto que encontró en una sala de fiestas de Ponferrada. La orquesta siguió con el mismo nombre auque era otro Bellas y otro Farto. La hija del segundo confesó a este periodista que no le había gustado nada a su padre la "maniobra" de Ramiro Rodríguez, que, dicho sea de paso, fue el líder de la Bellas Farto (fundada en 1945) desde el 31 de diciembre de 1953 hasta 1994. El padre de Ramiro también había sido músico y le había inculcado a su hijo esta actividad. El extinto empezó con la batería, pero cansado de andar cargando con la caja de percusión, aprendió a tocar el saxo, teniendo como maestro un gaiteiro y músico de renombre, Constantino Bellón, que da su nombre a un premio de gaita que convoca anualmente el Ateneo Ferrolán. Ramiro compatibilizaba su actividad como músico con la de ajustador electricista en la antigua Empresa Nacional Bazán. Descanse en paz el amigo y músico que, según me había comentado en vida, deja un gran archivo de partituras con todas aquellas piezas que animaban las fiestas populares de mediados del siglo pasado.


domingo, 2 de junio de 2013

Acto imborrable





Luis Mera al centro, flanqueado por miembros de la
comisión organizadora del homenaje. Siro y el autor del
blog, por la izquierda y Ana Romero y Ponte Far, por la
derecha. Falta Manuel Patinha
Como miembro de la comisión organizadora expreso mi enorme satisfacción. El homenaje a Luís Mera ha sido un acto de manifestación cívica que colmó la sede de la Fundación Novacaixagalicia no sólo de amigas y amigos del agasajado sino de emociones y sentimientos. En el ambiente -y uno estaba encima del escenario para percibirlo- había una comunión total de la concurrencia con el protagonista principal. El acto duró ¡dos horas y cuarto! y nadie se movió de la butaca hasta que el Grupo de Metales echó el telón. Las prolongadas ovaciones que el respetable (unas trescientas personas, todas las plazas ocupadas y decenas de personas de pie) le dedicó a Luís Mera fueron sintomáticas. Tengo que confesar que he quedado impresionado del ejercicio de fortaleza de ánimo, de entereza, de valentía que mostró el amigo homenajeado, que no tuvo inconveniente, en su discurso de agradecimiento, en poner sobre el tapete su quebrada salud -un cáncer al que explícitamente se refirió- para dejar claro que la cruda y dura realidad de un diagnóstico no lo amedrentaba y que seguiría luchando sin desmayo contra la enfermedad. Fue un pasaje que tensionó los puentes de conexión que, desde el principio, estaban tendidos entre en el auditorio y Luís Mera. Pero todo se desarrolló dentro de emociones contenidas porque el propio homenajeado se encargó de construir un discurso marcando las necesarias distancias, con un lenguaje sobrio y culto desprovisto de recursos fáciles que pudieran desbordar la sensibilidad de los presentes. Algo así como si hablara de una tercera persona. En general, fue un acto de nota diez, con intervenciones muy brillantes, diseñado muy al gusto del agasajado -lo mismo que el formidable repertorio del Grupo de Metales Santa Cecilia, cuya actuación fue largamente aplaudida- con la combinación de la literatura, arte y música, sin excluir el momento humano en el que tuvo un peso específico la familia de Luís Mera y los amigos. Una velada cálida, emotiva e imborrable.