Bernardo García Cendán, en el recuerdo

Hoy dedico mi post a un hombre bueno que nos acaba de dejar, Bernardo García Cendán. Tenía 71 años. Fue cura del Socorro, parroquia ferrolana en la que hizo muchos y buenos amigos. Los de mi edad se acordarán de él. Para los más jóvenes diré que realizó estudios eclesiásticos en Mondoñedo. Se licenció en Filosofía en la Universidad Católica de París y en la Pontificia Salamanca y en Sociología en la Universidad de París. Fue profesor en el Seminario de Mondoñedo. Posteriormente, como queda dicho, fue párroco de Nuestra Señora del Socorro de Ferrol hasta el año 1987. Simultáneamente fue profesor de la Escuela de Relaciones Industriales de Ferrol (antes Graduado Social). Desde 1987 ejercía como profesor de Sociología en la Universidad de Santiago de Compostela. Durante su estancia en Ferrol, participó activamente en la vida sociocultural de la ciudad colaborando en la fundación de instituciones como el Ateneo Ferrolán o ASFEDRO para asistencia de la drogadicción. También fue miembro fundador de la revista "Encrucillada" y de la asociación "Irimia". Es coautor del libro Meudon, une approche pastorale (París, 1970) y del libro Catolicismo en España (I.S.A. Madrid, 1985). Es autor del capítulo "Ferrol, estructura e identidade" (en O Feito diferencial galego, tomo III, editada por el Museo do Pobo Galego, 1991). Colaboró con artículos en prensa, pero especialmente en diferentes revistas como la citada "Encrucillada", "Lucensia", "Guía dos Libros Novos", "Tempos Novos", "Irimia", etc. Compuso textos para cantos litúrgicos, así como otros que fueron musicados por el Padre Feixóo, Miguel Varela y por grupos folk como Fuxan os Ventos o Saraibas. Hasta aquí sus datos biográficos. De su paso por nuestra ciudad, el profesor y escritor García Cendán dejó sobradas muestras de su talante generoso y solidario, preocupado siempre por los problemas de los más necesitados, labor pastoral que conjugó con otras actividades de carácter docente, además de actuar en numerosas ocasiones como conferenciante y ejercer un compromiso leal con el mundo intelectual con el que estaba en permanente contacto. El fallecido era natural de Vilalba (Lugo) en donde residió las últimas décadas hasta su muerte. Todos los años aprovechaba su presencia en las galas anuales que organiza Diario de Ferrol para reencontrarse con viejos amigos y parroquianos. Descanse en paz el amigo Bernardo García Cendán.