No podía pasar por alto un acontecimiento histórico para Ferrol dentro del mundo del deporte, concretamente del triatlón. El ferrolano Javier Gómez Noya, que hoy, a las 12.30, compite en cita olímpica, pertenece ya desde hace varios años a la elite mundial de esta modalidad en la que se combinan la natación, el atletismo y el ciclismo. En los JJOO anteriores se quedó con la miel en los labios, pero en esta oportunidad Gómez Noya va a por una medalla y si puede ser la de oro, mejor que mejor. Sería la coronación de una trayectoria, tocar el techo, lograr la gloria. Todos los ferrolanos, gallegos y españoles, estaremos pendientes de este menudo deportista cuya talla humana es tan gigante como sus propios méritos y laureles. No le será fácil alzarse el primero. Ahí están los hermanos Brownlee, que "juegan" en casa y que salen favoritos. Pero el ferrolano declaraba ayer que se encontraba en muy buen estado de forma física y que salía a por todas. Esta es la moral del ganador y de eso este deportista sabe mucho, pese a su juventud. Para seguir el gran evento, el concello ferrolano ha previsto la instalación de una pantalla gigante en la plaza de Amboage en donde a buen seguro se concentrarán miles de ferrolanos. En los JJOO anteriores competía de madrugada, hoy lo tenemos más fácil, será al mediodía, como queda dicho. Esperamos lo mejor de Gómez Noya y con independencia del resultado de la prueba sabemos todos sus paisanos que este muchacho pondrá toda la carne en el asador y solo eso merecerá el aplauso cerrado de sus incondicionales. Acabamos de ver días pasados como otra olímpica ferrolana, Iria Grandal pujaba por medalla, aunque en esta ocasión no lo consiguió, pero es muy joven y le quedan JJOO por delante. Hace muchos años, más de tres décadas otro ferrolano alcanzaba la categoría de olímpico en fútbol. Se trata de Juanito que jugó en el Racing y luego pasaría al Celta. Ferrol va consolidando páginas para la historia olímpica y la de hoy puede ser épica. ¡Todos con Javier Gómez Noya!
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